India está enfrentando una nueva ola de COVID-19 en 2025, lo que ha llevado al gobierno a activar varios protocolos para controlar la situación.
– Casos y Estadísticas : Hasta mayo de 2025, India ha reportado más de 45 millones de casos de COVID-19, con 266 casos activos y 44,508,622 pacientes recuperados. El número total de muertes atribuidas a la enfermedad es de 533,632[1].
– Vaccinación : Se han administrado más de 2.2 billones de dosis de vacunas. La campaña de vacunación se ha intensificado con una nueva ronda de dosis de refuerzo dirigida a ciudadanos mayores, trabajadores de primera línea y personas inmunocomprometidas. Más del 96% de los adultos elegibles han recibido dos dosis, y el 48% ha recibido al menos una dosis de refuerzo[3].
– Medidas de Prevención : Se han reintroducido las mandatos de mascarillas en espacios interiores congestionados y el transporte público en zonas de alta incidencia. Las escuelas y colegios en distritos afectados operan en modo híbrido, y las grandes reuniones y eventos en interiores están restringidos al 50% de la capacidad. Se ha aumentado la prueba RT-PCR en aeropuertos y estaciones de ferrocarril[3].
– Preparación de los Centros de Salud : El Ministro de Salud de la Unión, Dr. Mansukh Mandaviya, anunció la reapertura de los Centros de Cuidado COVID y auditorías del suministro de oxígeno para garantizar la preparación[3].
Estas medidas reflejan el compromiso del gobierno con la salud y la seguridad pública, especialmente ante la emergencia de nuevas variantes del virus.
