México enfrenta un desafío significativo en su sector energético, y según el Secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, la solución pasa por atraer inversión privada. En un reciente pronunciamiento, Ebrard destacó la necesidad urgente de inversión privada en el sector energético mexicano.
La nueva presidenta de México planea implementar reglas claras y transparentes para facilitar la participación de la inversión privada en el sector eléctrico. Este enfoque busca crear un entorno más atractivo y predecible para los inversores, lo que podría ayudar a superar las actuales limitaciones y deficiencias en la infraestructura energética del país.
Ebrard resaltó que la estabilidad y claridad regulatoria son esenciales para generar confianza entre los inversores, especialmente en un contexto donde las reformas constitucionales y las incertidumbres políticas han generado dudas sobre la viabilidad a largo plazo de las inversiones en México.
La iniciativa también se alinea con los planes de la próxima administración para impulsar planes de eficiencia energética en empresas clave como Pemex y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), según lo indicado por la Comisión Nacional para el Uso Eficiente de la Energía (Conuee).
La aprobación de reglas claras para la inversión privada en el sector energético podría marcar un punto de inflexión crucial para el desarrollo sostenible y la seguridad energética de México, ayudando a abordar los desafíos actuales y a garantizar un futuro más seguro y eficiente en términos de suministro de energía.