
El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, abandonó abruptamente la cumbre del G7 en Alberta, Canadá, un día antes de lo previsto debido a la escalada de tensiones en Oriente Medio, particularmente entre Israel e Irán.
Trump había asistido a la cumbre del G7, donde mantuvo reuniones bilaterales con otros líderes, incluido el primer ministro canadiense Mark Carney. Sin embargo, su estancia se cortó drásticamente después de una serie de eventos tensos en la región.
En una publicación en su red social, Trump expresó su preocupación por el conflicto, criticando a Irán por no firmar un acuerdo y advirtiendo que Irán no puede tener una arma nuclear . También pidió la evacuación inmediata de Teherán, lo que aumentó la sensación de urgencia y peligro.
La Casa Blanca anunció que Trump regresaría a Washington D.C. para una reunión con el Consejo Nacional de Seguridad en la Sala de Crisis de la Casa Blanca, a fin de abordar la crisis en curso.
Durante su breve estancia en la cumbre, Trump se negó a firmar una declaración conjunta que llamaba a una desescalada entre Israel e Irán, lo que reflejó las profundas divisiones entre los líderes mundiales sobre cómo manejar el conflicto.
La decisión de Trump de dejar la cumbre anticipadamente añadió a la incertidumbre y la tensión en torno a las operaciones militares de Israel en Irán, que han incluido ataques a la sede de la televisión estatal iraní durante una emisión en directo.