
Una tormenta de polvo impresionante cubrió Ciudad Juárez, Chihuahua, el martes 18 de marzo, transformando el paisaje urbano en un escenario que evocó imágenes de una película apocalíptica.
Causas del Fenómeno
La tormenta de polvo se generó debido a la entrada del frente frío número 36, que trajo consigo vientos intensos y un drástico descenso en las temperaturas. Este frente frío, combinado con una corriente en chorro polar y subtropical, produjo vientos de hasta 120 km/h en algunas áreas[1][3].
Impacto en la Región
La nube de polvo redujo la visibilidad a apenas unos metros, afectando severamente la circulación vehicular y la vida diaria de los habitantes. La tormenta se extendió rápidamente hacia El Paso, Texas, y otras áreas circundantes. El color de la atmósfera adquirió un tono sepia, creando una estampa surrealista en la frontera[1][4].
Medidas de Seguridad
La Coordinación Estatal de Protección Civil (CEPC) activó una alerta urgente, recomendando a la población tomar precauciones y mantenerse informada sobre las actualizaciones del clima. Se suspendieron las clases presenciales en universidades y se cerraron varios tramos carreteros, como el que conecta Villa Ahumada con Ciudad Juárez, debido a las malas condiciones de visibilidad y el riesgo que representan las ráfagas de viento[1][3].
Accidentes y Cierres
Hasta el momento, se reportaron tres accidentes viales, incluyendo un choque múltiple con lesionados en la carretera Ahumada-Juárez. El aeropuerto Internacional de Ciudad Juárez suspendió vuelos como medida preventiva. Diversas vías en Ciudad Juárez fueron cerradas, complicando la movilidad de los habitantes y visitantes[1][3].
Recomendaciones para la Población
Se recomendó a los automovilistas reducir la velocidad y activar las luces intermitentes durante la tormenta. Si la visibilidad disminuía drásticamente, se aconsejaba detener el vehículo en un lugar seguro y permanecer dentro hasta que las condiciones mejoraran. En casa, se aconsejó cerrar puertas y ventanas para evitar que el polvo entrara y mantener a los niños y personas vulnerables alejados de las áreas expuestas[1].